La bicicleta, un instrumento capaz de inspirar obras de arte del tamaño de una ciudad

Obra de Stephen Lund en Strava art

Obra de Stephen Lund en Strava art

Ciclistas de todo el mundo dibujan figuras increíbles a través de sus GPS para después compartirlas. El llamado strava art.

En otras ocasiones hemos hablado sobre aplicaciones móviles como Strava o Endomondo que, además de ser muy buenas herramientas para mantenernos en forma con nuestra bicicleta, son nuevas redes sociales dónde compartir recorridos, tiempos que nos hacen sentir orgullosos, entre otras impresiones. Pero lo que quizá no imaginaban sus creadores a la hora de programarlas es que los usuarios le sacarían un provecho más artístico utilizando las rutas que quedan marcadas en las calles por donde circulan.

Tal y como predice la expresión “mente sana in corpore sano” hay una relación muy estrecha entre la riqueza de nuestra mente y el entrenamiento de nuestro cuerpo.

Por eso queremos hacer referencia a este (creemos que ya se puede llamar así) “movimiento” que sacándole provecho a las nuevas aplicaciones digitales ha convertido ciudades en grandes lienzos.

Obra de Stephen Lund en Strava art

Obra de Stephen Lund en Strava art

Ciclistas de todo el mundo planifican y preparan un recorrido que dará como resultado una imagen (algunas de ellas realmente complejas) que finalmente compartirán con amigos e, incluso, con el resto del mundo.

Si te estás planteando un nuevo reto este es el mejor para mezclar deporte, arte y nuevas tecnologías.